17 diciembre, 2007

Navidades in-sostenibles

Suponga el lector que por un achaque cualquiera acude al médico. Suponga después que éste le diagnostica altos niveles de colesterol malo en sangre y que sus arterias se ven afectadas por la gran cantidad de grasa depositada en ellas. Sume a esto que el resto de su familia va también al facultativo y que todos los que viven bajo su techo se hallan en la misma situación: rezuman sebo por todos los poros. Habiéndose planteado esta situación, ¿seguiría comprando panceta para desayunar? ¿Quedaría con los amigos para dar cuenta, un día sí y otro también, de unos callos a la madrileña?

El sentido común seguro que le mostrará otros caminos para seguir viviendo, ¿o no? Con el calentamiento global pasa algo muy parecido. Sin embargo, la sociedad sigue (seguimos) pensando que esta enfermedad no va a afectar a su nivel de vida inmediato, que no es una cosa cercana y que sus actitudes no contribuyen a alargar esta agonía planetaria. Y como casi siempre, se equivoca. El problema del cambio climático afecta a todos, a los de aquí y a los de allá, y sólo se podrá regular (que no solucionar, ¡ojo!) siendo consecuentes con que cada acción local, cada gesto, cada decisión, son gramos de grasa que se acumulan en las arterias vitales del planeta. Se ha llegado a un (delicado) momento en que a políticos, intelectuales, presidentes de las asociaciones de vecinos, maestros y estudiantes se les llena la boca con palabras como sostenibilidad, cambio climático, reducción, reciclaje... Pero, ¿van estas afirmaciones lanzadas al viento, más allá de ser sólo simples palabras vacías de contenido? Me temo que en muchos de los casos, no.

En Santa Cruz, por ejemplo existe una Sociedad de Desarrollo (¿sostenible?) que, supongo, servirá para que la ciudad no se quede estancada, evolucione, mejore. Pues bien: esa institución ha programado una fiesta de año nuevo "con el mayor espectáculo de fuegos artificiales de Canarias". ¿Se ha tenido en cuenta en ese proyecto la repercusión medioambiental que puede llegar a generar la quema de cientos de kilos de pólvora? ¿No se podría aplicar el dinero que cuesta ese espectáculo efímero en sustituir lámparas incandescentes por otras de bajo consumo, por ejemplo? ¿No habría que comenzar a pensar en programar fiestas de carácter verdaderamente sostenible?

Las Navidades, estas fiestas de consumo desaforado y absurdo, son un flaco favor para la sostenibilidad: la basura, los envases, los papeles, las tonterías que compramos y mañana tiramos se acumulan en un espacio insular en el que apenas queda ya hueco para los propios desechos que generamos. Artículos como éste no son, la mayoría de las veces, políticamente correctos: es tabú criticar las tradiciones, las decisiones populares, aunque éstas sean perjudiciales y dañinas. Sólo me quedaría decir dos cosas: a los que coincidan conmigo en que debemos cuidar cada detalle en beneficio del futuro de nuestros hijos, que sólo actuando localmente podremos mejorar el estado global del planeta. A los que me criticarán por aguafiestas, aburrido y demagogo les conmino a volver al principio de este artículo: aunque sus corazones ya no puedan con más grasa, cenen esta noche un bocadillo de chorizo y dos morcillas. Al fin y al cabo, qué es una raya más para un tigre.

14 diciembre, 2007

Navidad in-sostenible

Los ayuntamientos españoles gastan en las luces de Navidad la misma cantidad de energía que se necesita para abastecer a un barrio de 50.000 personas durante todo un año, o lo que es lo mismo, unos 30 millones de kilovatios por hora. Esto provoca unas emisiones de 10.000 de toneladas CO2, cifra que muestra la más que evidente dudosa “insostenibilidad” de nuestras Navidades.

El alumbrado navideño de las calles españolas cada vez se enciende antes y, cada vez, son necesarias más bombillas para alcanzar el grado de sofisticación de los decorados. El derroche energético de las Navidades convierten los mensajes de sostenibilidad y ahorro energético en un decálogo de buenas intenciones que pasan al olvido durante los dos últimos meses del año.
Regala en estas fechas sostenibilidad al planeta y comprométete a ahorra energía.

Fuente: http://www.frenaelcambioclimatico.org/blog/

11 diciembre, 2007

Santuario de Ballenas en Chile ¡Ya!

17 y 18 DE DICIEMBRE: PROTESTA PACÍFICA CONTRA CAZA DE BALLENAS Y PETICIÓN PARA QUE EN CHILE SE CREE UN SANTUARIO DE BALLENAS.

A través de la presente carta se invita a todas aquellas personas chilenas y medios de comunicación que se sientan comprometidas con el medio ambiente y la vida animal a unirse a una campaña que pretende protestar de forma pacífica por la cruel matanza de ballenas que está realizando Japón según ellos con fines científicos.Organismos Internacionales y ciudadanos de otros países Les rogamos nos apoyen en sus respectivos países durante los días 17 y 18 de diciembre de estás u otras formas.

Les pedimos además que divulguen esta información en los medios de comunicación de sus respectivos países y entre sus conocidos. Propósitos1. Pedirle al Gobierno Chileno que evite la entrada de barcos Japoneses a nuestros territorios para llevar a cabo la injustificada caza de ballenas.2. Obligar al gobierno Chileno a que solicite continuamente ayuda a organismos internacionales.3. Que se impida ahora y en un futuro una caza de éste u otro país de tantos ejemplares de ésta o cualquier otra especie.4. Declarar las aguas jurisdiccionales chilenas como Santuario de Ballenas.Manifestación17 y 18 de diciembre 2007

Existen tres modos de manifestarse:

1. Colocar en el automóvil, bicicleta, micro, taxi u otro medio de transporte el siguiente mensaje dirigido a la presidenta de nuestro país, la Sra Michelle Bachelet “ PRESIDENTA BACHELET, IMPIDA LA CAZA DE BALLENAS POR PARTE DE JAPÓN”

2. La segunda forma de manifestarse es usar en la muñeca amarrada o enganchado en alguna parte de nuestra vestimenta un lazo verde ya sea de cinta, lana u otros.

3. La tercera y tan importante como las otras es firmar la carta que Greenpeace ha elaborado. Para pincharla se debe ingresar a la siguiente dirección:

http://www.greenpeace.org/international/campaigns/oceans/whaling/great-whale-trail/make-the-call-for-whales

www.estamosenpeligro.blogspot.com

Que ya está bien, hombre

En esta provincia (Santa Cruz de Tenerife) hay cuatro periódicos. Hace algunos fines de semana (día 24) semana se produjo una manifestación en la ciudad de Santa Cruz, sobre la que tres de los rotativos coincidían en sus titulares: más de 4.000 personas se concentran para protestar contra el desarrollismo. En el tercero, la importancia de la marcha se redujo en muchos miles de asistentes. ¿Qué es lo que ocurre? ¿Es importante, beneficioso o coyuntural quitar yerro a este yunque sobre el que se golpea? ¿Con qué fin? ¿Hay que desautorizar la voz de miles de personas para que otras muchas sigan creyendo que el sistema desarrollista instalado desde los sesenta sigue siendo apto para Canarias? Parece que sí.
Las manifestaciones se convierten, es verdad, en muchas ocasiones, en puras cabalgatas demagógicas que enarbolan banderas que nada tienen que ver con lo que se solicita. ¿Pero es este el caso? Desde hace algunos años, noviembre es la plataforma para que los colectivos más sensibilizados alcen la voz con un claro ¡Basta Ya! Parece que se corre el riesgo de institucionalizar la cita, de vaciar de contenido esta marcha, de olvidar la importancia de sus fines principales. Y la prueba está en que ya hasta algunos informadores, mediatizados y coaccionados, claro está, limitan números e importancia a la cita.
El proceso evolutivo que sufre Canarias es doloroso y perjudicial. Es un proceso mutilador que se aplica con retroexcavadoras y bolsas de cemento, comiendo metros a la costa cada día, destruyendo el suelo agrícola, limitando recursos ecológicos en beneficio de kilómetros de asfalto, ya sea para carreteras, enormes rotondas, ampliaciones de aeropuertos, puertos o simplemente urbanizaciones plagadas de adosados. No es demagogia: es lógico pensar que la sociedad necesita espacios infraestructurales que solucionen los problemas de la superpoblación y el crecimiento pero por lo que parece, el modelo no es el adecuado, o por lo menos no es el que los propios ciudadanos quieren. Esta manifestación de la semana pasada no está orquestada por ningún partido político; la hacen, en su mayoría, asambleas de vecinos (más o menos politizadas, pero de vecinos al fin). Por el contrario, sí que se podría asegurar que la demagogia está en decir que los que se manifiestan deberían ofrecer las soluciones. Esto es risible: los que salen a la calle, hartos ya de todo esto, no han sido elegidos por nadie, y en la mayoría de los casos no tienen la cualificación para proponer nada, faltaría menos. Pero, como ciudadanos, ostentan todo el derecho, y el deber, a cuestionar lo que perciben que les hace daño. Y la falta de suelo, de árboles, de costa, con todo lo que ello supone, hace daño. Hace falta que se vuelva a potenciar el campo, hace falta que se reduzca la contaminación, que se planten más árboles, que haya menos coches, que la vida en las Islas sea más vivible. Y para ello, además, hacen falta soluciones certeras, sostenibles, respetuosas, las hay, seguro que las hay. Hacen falta políticos que las busquen y que las pongan en práctica. Y sobran políticos adocenados y con los discursos aprendidos. Que se pongan a trabajar, y que no le echen la culpa a la inmigración, que ya está bien.

10 diciembre, 2007

Asamblea General de Jóvenes Verdes




Del 15 al 16 de diciembre de 2006 tendrá lugar la III huerta de Jóvenes Verdes, donde tod@s l@s soci@s están llamad@s a participar en el máximo órgano de la asociación juvenil ecologista: "La Huerta" (Asamblea General)


¿Quieres saber más? ¿Te gustaría participar? Más info, haciendo clic aquí .
Un saludo ecologista de Jóvenes Verdes.